Una empresa líder en el sector de la maquinaria agrícola necesitaba mejorar la eficacia y la durabilidad de su maquinaria, que se exporta a todo el mundo y se utiliza en diversas condiciones de funcionamiento. Con el objetivo de mantener un alto rendimiento y reducir los tiempos de inactividad, la empresa decidió trabajar con un socio especializado en el diseño de cabezas de rótula y varillajes premontados, elementos fundamentales para garantizar la fiabilidad y un rendimiento mecánico superior.
Retos de la aplicación
Las máquinas agrícolas tienen que hacer frente a condiciones de funcionamiento exigentes, como la exposición constante al polvo, la suciedad y otros contaminantes, además de funcionar con cargas elevadas y movimientos complejos. Los principales retos incluyen:
– Alto desgaste: los componentes estaban sometidos a altos niveles de desgaste debido a las altas velocidades de giro y a los grandes ángulos de giro.
– Cargas pesadas: las máquinas tenían que funcionar con cargas importantes, lo que requería componentes capaces de soportar grandes esfuerzos, mantener una holgura radial baja y una fricción reducida.
– Mantenimiento reducido: era esencial minimizar el mantenimiento, para mantener bajos los costes de funcionamiento, incluidos los de lubricación, y reducir los tiempos de inactividad no programados.
– Fiabilidad: las máquinas tenían que garantizar un alto rendimiento y funcionar continuamente sin fallos inesperados, especialmente en entornos contaminados.
Por tanto, las cabezas de rótula tenían que garantizar un funcionamiento correcto incluso en presencia de contaminantes, manteniendo al mismo tiempo un juego radial y axial reducido, baja fricción y resistencia a la corrosión. También tenían que ser duraderas, fiables y de alto rendimiento, con una vida útil prolongada que redujera el mantenimiento.